Hace treinta años George Miller dejó huella en la industria cinematográfica con la trilogía Mad Max, una serie de películas llenas de autos y acción, hoy día la tarea de Miller es volver a poner en el mapa de la industria a su universo cinematográfico. En ese sentido, hace unos días en una platica que mantuve con Dan Campos (podcastero de Churros y Palomitas) y Dany Saadia (fundador de Dixo), se cuestionaba esta época en la que vivimos en donde predominan secuelas y reinvenciones de películas ochenteras. El tema de fondo en aquella platica y lo que Dany conjeturó de manera tajante fue que si se hace un remake o secuela el objetivo final debería ser aportar algo nuevo y no repetirse o hacer cosas deficientes o de menor calidad, pues se perdería el sentido de tales creaciones.
Esta introducción al comentario extendido de Mad Max va en relación con la manera en que regresa esta franquicia, si bien las predecesoras se han consolidado como unas cintas de culto, hoy día, hay un giro en esa presentación, ahora regresa como un blockbuster completo, defendiendo el significado del término, en ese sentido Fury Road es un delirante recorrido por secuencias y momentos de trepidante acción que dejan ver a otros blockbuster como un juego de niños.
Max Rockatansky (Un Tom Hardy serio y con escasos diálogos) nos presenta un mundo apocalíptico en dónde los suministros para el desarrollo de la vida están más que limitados, nuestro protagonista es secuestrado y siendo utilizado como “bolsa de sangre”, así y de manera fortuita Max conocerá a Imperator Furiosa (Charlize Theron, que cumple de manera perfecta el papel de heroína, incluso por momento parece ser ella la verdadera protagonista del film), habiendo pasado por una infernal tormenta de arena. Ambos con objetivos distintos –los de Furiosa más definidos que los de Max- intentarán escapar de la pandilla que controla La Ciudadela y otras bandas más regiones aledañas.
Lo primero que podemos reprocharle a la cinta es su escaza profundidad en el guión, que apenas nos deja saber un poco de los personajes centrales sin llegar ahondar en ellos, sin embargo, el guión resulta satisfactorio en función de lo que Mad Max es: Un blockbuster en el más puro sentido de la palabra. En ese terreno los diálogos resultan suficientes para pasar de una secuencia a otra explicándonos sólo lo necesario. De hecho y acaso, contra diciéndome un poco, la cinta luce pos su escases de díalogos y brilla por utilizar eso que provoca la magia del cine: La imágen
¿En dónde recae la fuerza de Mad Max? Precisamente en las secuencias acción. George Miller regresa con la fuerza que le caracterizó en la trilogía original y ahora con las nuevas tecnologías y aditamentos necesarios crea momentos de delirante vertiginosidad que pondrá al espectador ante un apabullante paseo visual lleno de colores que inundan todos los sentidos. Como tal la cinta tiene dos lecturas muy claras una más honda que otra, pero ninguna anula u es mejor que otra, como cualquier producto cultural, las interpretaciones que parten de esta cinta quedan en el espectador.
Mad Max es en primera instancia una cinta que no pretende más que divertir al espectador, con excéntricos personajes que dejaran al visor absorto por lo que observa, sólo imaginen a una pandilla de autos modificados conducidos por locos seres que ven en la destrucción y la muerte la mejor manera de morir, todo esto mientras conducen a toda velocidad siendo incentivados por un guitarrista en una plataforma en movimiento. – si ponemos cuidadosa atención esta figuras, detalles y características en los personajes son palpables desde la primera película de la saga.
La fotografía en movimiento es excelente siendo esto un claro ejemplo de la depuración con que se hizo el metraje, la edición brilla por sí sola, son increíbles las coreografías y la inventiva para hacer de los autos un sitio de espacialidad y desarrollo central de la acción. El australiano director reinventa su propio universo, utilizando el diseño digital para crear fotogramas para recordar –por ejemplo aquella vista en plano abierto de la entrada a la tormenta de arena-.
En estricto sentido la película está estructurada en tres largas secuencias de persecución que si bien a cinta va de punta “a” al punto “b”, y aunque es previsible lo que sucederá en el desarrollo de la película y en cierto sentido es una historia convencional, lo que vale la pena es –como ya lo mencioné- la capacidad inventiva para crear momentos de acción pura y bien hecha.
Aquí llegamos a la segunda lectura de la película, a partir del estreno de la cinta algunos comentaristas de la red se han declarado en contra de la película por ser una cinta para mujeres, una cinta feminista. Si usted está leyendo esto y ya vio la película entenderá a que se refieren. En función del personaje femenino de Charlize Theron hay varias representaciones de igualdad, equidad y desprendimiento respecto al genero masculino, las referencias son varias (El despojo del cinturón de castidad, la función de soporte que Max hace para que Furiosa dispare su arma, y prácticamente el rol anti-sensual de Charlize).
Creo que aquí la segunda lectura de la película funciona aun mejor que la primera, en donde la acción es preponderante, Miller escaso de guión, escaso de una historia como eje fundamental, cuenta y desarrolla ideas que nos corresponden como sociedad a través de simples guiños y gestos entre nuestros protagonistas, a través de simples imágenes, revitaliza y aporta a la franquicia. Los prejuicios personales sobre los temas de genero, quedan para uno y es valido ver lo que uno deseé en una cinta. Pero el hecho es que Miller entiende y usa su película como una exposición de el papel de la mujer en la sociedad actual.
Estamos más o menos a un mes del estreno en México de películas como Fast and furious 7 y a semanas de Avengers: Age of Ultron, lamentablemente ni la primera ni la segunda cumplen o tienen algo que Mad Max: Fury Road, esto es: Una buena edición y un buen uso del lenguaje cinematográfico. Un blockbuster en el más puro sentido de los términos se entiende como un mero entretenimiento, a este tipo de cine como comercial, lo mínimo que podemos exigir es que sea cine bien hecho, de eso carece el cine de súper héroes, de autos rimbombantes toda velocidad o de robots grandotes, usted sabe a qué me refiero. Vea y compare.
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